Interesante nota en Reuters donde cuentan como las cámaras mirrorless no terminan de generar el atractivo necesario para poder generar los ingresos que se esperaban. Incluso Nikon recorta la producción de ese tipo de cámaras por los bajos ingresos que tuvieron.
Todo se resume a que los consumidores están más interesados en comprar smartphones con cámara que una cámara digital per se. Y eso que el sistema mirrorless parecía ser el sagrado grial de la fotografía digital por su avance tecnológico y calidad de imágen.
Incluso yo mismo pasé por una experiencia similar hace poco cuando vendí una cámara Sony que tenía y compré una Lumix ZS-20 como reemplazo para tener encima y sacar fotos. Creo que la usé 3 veces y después de 6 meses la vendí. Es simple. Tengo una cámara de fotos de 8Mp conectada a internet todo el día en mi bolsillo. Para que quiero otro aparato más que encima no me ofrece las mismas características que un iPhone 5? Más allá que sea debatible algunas características como el zoom, el flash y demás. El usuario promedio busca la practicidad y la inmediatez. Un smartphone lo tengo siempre mucho más a mano que una cámara de fotos digital.
Al final Steve tenía razón cuando dijo que iba a revolucionar la fotografía. Pero lo están haciendo sin bombos ni platillos y parece que las grandes casas de fotografía no se dieron cuenta.