Muchas veces cuando empezamos en el mundo de la fotografía, uno de los primeros temas que fotografiamos son las flores. Será que es fácil, no se mueven (si no hay viento :P) y generalmente tienen lindos colores?
Podríamos decir que es un paso casi obligado incluso. Y a medida que vamos aprendiendo, pocas veces volvemos a fotografiarlas. Sin embargo hay gente que se va especializando en este tema y nos dejan hoy algunos consejos:
Para los principiantes, el uso del macro: Ese iconito con forma de flor es ideal para sacar fotos a corta distancia.
Piensa como una flor: Si una flor está tirada en el piso, entonces deberías tirarte en el piso también. Fotografiar flores no se trata de documentar el hecho de que existen, aunque sea por un día. Se trata de contar la historia de la flor para inmortalizarla durante mucho más tiempo del que pueda vivir. Por ejemplo, mirá esta foto. Es la típica foto de “ah, eso es un cacho de pasto con un par de florcitas…como en todos lados”.
Pero si buscás otro ángulo, metiéndote literalmente entre las flores, podés encontrar cosas más interesantes.
La foto de arriba también amerita comentar el tema de las relaciones con otras flores. En esta toma por ejemplo, se decidió usar una gran apertura para desenfocar a las fotos de alrededor pero que sirven para mostrar que unas con otras están cerquita y no todas reciben los mimos de los abejorros.
Les dejo aquí otras fotos que fuí sacando en diferentes momentos.
Visto en: Digital Photography School